Lance sobre silla de Ruedas

La Robla. (León). (EUROPA PRESS).- Un muerto y un herido de carácter grave es el balance de un accidente de circulación registrado en la madrugada de hoy en la localidad leonesa de La Robla. En concreto, el siniestro se produjo en torno a las 04.45 horas de hoy a la altura del punto kilométrico 120,600 de la carretera N-630, en La Robla, cuando, por causas que se desconocen, chocaron frontalmente un Rover Montego matriculado en León y un Citroën C-15 de Oviedo. En el accidente perdió la vida el conductor del Citroën, un varón de 23 años, mientras que el conductor del Rover, A.L.S, de 24 años, resultó herido de carácter grave.

Ocurrió hace 9 años, el día 24 del mes de junio. El accidente le produjo a Álvaro tantas lesiones que nadie creía que sobreviviera, pero lo hizo y ahora sueña con levantarse un día y caminar. El apoyo de su familia resulta fundamental, como también lo es su fuerza interior por superarse. Se requiere una gran fortaleza y mucho sacrificio porque, como el nos cuenta, cansa mucho no poder hacer nada y depender de los demás para todo.

Álvaro es un gran aficionado a la pesca…pescaba a seca con las moscas que el mismo montaba. Yo, compañero de su padre y amigo de la familia, le invite a que se hiciera socio de Pescaleón y formase parte de esta asociación que entonces comenzaba sus pasos, le entusiasmo la idea y pasó a formar parte del grupo y ahí resurge su afición, vuelve el pescador y aquí nos lo cuenta:

Hola amigos de Ninfa quiero compartir con vosotros todo lo bueno que me está pasando. Para empezar quiero deciros que tengo problemas para la comunicación y aunque esto lo leáis fácil ha sido muy complicado conseguirlo puesto que tengo que puntear las letras con mi torpe dedo índice en un abecedario para que alguien haga palabras y las escriba, sé que no es mucho, pero para mí es un gran logro… ya que casi nada puedo hacer. Cuando no hablas, no caminas, te tienen que dar de comer como a un bebe y nada puedes hacer sin ayuda te vuelves muy vulnerable…no es fácil seguir, no. Pero que no os de pena porque estoy bien y si os cuento esto es para poneros en situación y también por si algún lector lo está pasando mal que sepa que hay que seguir adelante, no queda otra. La vida puede que no sea la fiesta que esperábamos, pero mientras estamos aquí debemos de bailar…aunque sea en una silla de ruedas. A veces se nos presenta muy complicada y no es fácil para nadie pero hay que tomarla según viene y de la mejor forma posible, si tienes una familia que te quiere y los amigos te respetan poco más se puede pedir, bueno…si, pescar. La felicidad no es constante para nadie, viene y se va, y yo, creerme, tengo muchos momentos felices. Sigo con ilusión, rehabilitándome con mucho esfuerzo y sacrificio, sé que no volveré a ser aquel que fui pero quiero semejarme lo más posible.

Mi afición a la pesca me viene desde niño puesto que soy de La Pola de Gordón que está bañada por el Bernesga, río truchero donde los haya. Estudie F.P., en el colegio Virgen del Buen Suceso de la Robla (León), en el que me forme como Técnico Especialista en Instalaciones y Líneas Eléctricas, ahí tuve la suerte de tener como profesor a Benito, una excelente persona, entrañable, un maestro del montaje de moscas y que además hace uno de los mejores tornos que existen. Pertenecí al equipo de Casting del colegio donde cosechamos muchos triunfos. Una vez abierta la veda me pasaba todo el tiempo libre en el río, era un vicioso de la pesca me decían mis padres, pero yo insistía porque aparte de pasármelo muy bien siempre aprendía algo, la observación del río enseña y mucho, todos los días recogía algún insecto como muestra para posteriores imitaciones, con una imitación de esas gané el Primer Premio al Mejor Montaje de la Semana Internacional de la Trucha, unos días antes de tener el accidente. También, por esas fechas, saqué la trucha más grande de mi corta carrera como pescador, una pintona autóctona que midió 79 cm. Estas dos conquistas no eran más que el reflejo de una vida plena y feliz, pero el mundo se paró de repente y me baje en la peor estación posible, fue el destino quizá o que se yo, fuera lo que fuese ahora eso ya no importa, lo verdaderamente importante es que vuelvo a sentir la afición a la pesca, se que todo va a ser diferente y muy difícil pero lo asumo sin dudarlo con tal de disfrutar del río y de los amigos.

Los derechos e igualdad para las personas en mi situación no son una realidad, hay mucha propaganda y poca efectividad, todos son problemas y la exclusión social es tan evidente como difícil de asumir, hay mucha gente que mira la silla pero a ti te ignora y si lo hace es con lastima y rubor, como poniendo una barrara entre los dos…¡¡No saben que soy pescador!!, no saben que pienso y tengo esperanza…la esperanza es mi poder, pero a esto también te acostumbras, sigues con visión positiva y tomando con paciencia todas las dificultades. Por eso mi integración en Pescaleón fue de lo mejor que me pasó en estos años. Desde aquí animo a todos los que estén en mis circunstancias que se hagan socios y me acompañen en esta aventura. No me imaginaba que iba a ser tan bien aceptado. Me parece como que aquellos amigos que fui perdiendo por el camino regresaran de repente. Acudo a los encuentros, a las reuniones, quedadas de limpieza y de pesca. Cuando estoy con ellos me siento menos discapacitado y entonces soy otra persona, me olvido hasta que voy en silla de ruedas, todos me tratan con afecto pero sin compasión…uno más y estoy encantado…uf, en la comida de Navidad, por sorpresa, me nombraron Socio del Año y me dieron un titulo y una foto enmarcada donde estamos todos los que fuimos a limpiar el Pantano de Selga de Ordás, bueno yo a mirar…jajaja, me hizo mucha ilusión y encima me lo entregó mi amigo Rodrigo con el que he compartido muchas jornadas de pesca, fue sin duda el mejor regalo que tuve estas pasadas Navidades. Aquí, en Pescaleón, hice muchos amigos…no quiero nombrar a ninguno para que no se me olviden otros. Pero no puedo por menos que citar a Tomas porque alguna de sus moscas me dio soluciones para evitar rechazos de mis emergentes, ya sabía de él pero no lo conocía personalmente y fue una agradable sorpresa encontrármelo en las quedadas. Para todos mi agradecimiento por vuestra consideración.

Ahora viene lo mejor… Pescar imaginándotelo no es lo mismo, pero cuando no te queda otra cierras los ojos y recurres al recuerdo de aquella tirada que siempre te alegraba el día y la repites mil veces hasta que la trucha toma la mosca y entonces la emoción vuelve. De nuevo estás pescando, estás imaginando que pescas y eso, para mí, ya es mucho. Pero como tengo mucho tiempo para pensar y poco para pescar he ideado una modalidad nueva y antes de patentarla quería darla a conocer a través de esta revista, se trata de la modalidad de pesca a mosca seca con lance sobre silla de ruedas, es una modalidad diferente pero no tiene porque ser menos efectiva que las demás. Este sistema que ya se ha probado en el circuito sensorial de la Magdalena y en las pasarelas del embalse de de Selga de Órdas (León), ha tenido una muy buena acogida entre los pescadores con movilidad reducida. Esta técnica se hace más precisa cuanto más la practiquemos, la silla tiene que estar próxima al agua y bien frenada, el lugar despejado para no enganchar el aparejo y tener que estar pidiendo ayuda cada poco. Es importante tener fuerza en los brazos, lanzar con precisión y estar atento a la picada. A mí, de momento, me tenéis que ayudar a lanzar y recoger pero la paciencia ya la pongo yo que de eso ando sobrado…jajaja, y además pronto lo haré solo, de verdad… confiar en mí, palabra de pescador. Como de momento no tengo fuerza para sujetar la caña ya he mandado que me acoplen un cañero en el brazo derecho de la silla. También le voy acoplar unos bolsos para llevar los aparejos y demás enseres. Habrá que llevar sacadera y con el mango bien largo por si las moscas, bueno por si los peces comen las moscas. En serio, estoy decidido a pescar y ya sueño con ver como una trucha coge mi mosca y tira incesantemente de la línea…no hay un solo día que no tenga en mi pensamiento el río y la caña. Soy un soñador…mi madre dice que siempre lo fui. Si nos vemos por el río saludarme que siempre llevo alguna mosca repe.

A vuestra disposición siempre... Álvaro Lombas Sinoga.

Como veis Álvaro está listo y a pesar de su severa discapacidad lucha por conseguir progresos cada día. Sus ojos claros de pescador ilusionado hablan por el silencio de su voz y nos dicen, sin lugar a dudas, que quiere volver a pescar, solo falta que la administración se ponga las pilas y facilite la aproximación al río de todos, incluyendo a los que practiquen el lance sobre silla de ruedas. Llevan años reivindicando derechos y soportando discriminaciones por su discapacidad…aparcamientos, ubicación en lugares de ocio y espectáculo, servicios no adaptados, barreras infranqueables y mil cosas más, creemos que ya llegó el tiempo de políticas serias que asuman los problemas de los disminuidos físicos y no los carguen sobre sus familias. Por ello, ahora que andan dándole vueltas al borrador de la nueva ley de pesca, bien podían tener en cuenta a estos pescadores para darles su sito y su derecho a pescar, "dare cuique suum", que menos que adaptar sitios en lugares con posibilidad de pescar. Sé que esto requiere un esfuerzo económico pero las leyes deben de garantizar el bienestar social de todos. Bien es cierto que algún lugar hay ya habilitado para ayudar a estos aficionados a la pesca pero no es menos cierto que hacen falta más y mejores. Echamos de menos en esta ley un programa para la integración y la normalización de la pesca para todas las personas con discapacidad, solo se trata de adaptar sitios para igualar las diferencias, derecho a la igualdad de oportunidades, Álvaro no pretende presentarse a la Semana Internacional de la Trucha pero si puede hacer una pesca como deporte adaptado, se trata de salud y recreación, no de entrenamiento y competición. Si la actividad física en la naturaleza es muy importante para todos para las personas con minusvalías es vital, porque necesitan potenciar sus zonas dañadas para compensar sus deficiencias y poder mejorar, también necesitan divertirse, integrarse y sentirse vivos. La investigación científica tiene demostrado que cualquiera actividad adaptada les es beneficiosa y motivante mejorando su nivel físico y psicológico.

En este sentido tengo que destacar la dedicación que a estas personas presta Ninfa Calidad dentro de su proyecto basado en el uso sostenible de la pesca como recurso para el desarrollo rural. Un sueño tan simple como pescar, que para nosotros es tan cotidiano, para estas personas es un mundo mágico que habita en sus almas y hacer realidad esos sueños solo depende de nosotros, de nuestra voluntad. El coraje que demuestran por intentar buscar el aspecto positivo dentro de sus propias limitaciones me parece un aspecto tan saludable espiritualmente que a mí me contagia humanidad.

Quiero agradecerte desde aquí, amigo Álvaro, el esfuerzo que has hecho para contarnos un poco de tu vida pero también darte las gracias por el ejemplo que nos das con tu pundonor y fuerza de voluntad, que grande eres y que poco necesitas para ser feliz.

Un abrazo.

Rodrigo Prado Núñez. (Lachis)
Vicepresidente de la Asociación Pescaleón.